En una misa por el 34 aniversario de la unificación de los cuerpos policiales en la Policía Nacional, la autoridad católica propugnó avanzar hacia una república participativa “por el bien común, capaz de hacernos sujetos de esperanza, sujetos de propuestas”.
Intentemos, juntos, buscar un camino unidos sobre una base común, y empecemos a superar los problemas de hambre, de miseria, de crisis, de corrupción, decidiendo abiertamente luchar contra eso, añadió.
Al oficio religioso asistió el presidente Pedro Castillo, así como los jefes del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, el Ejército, la Marina y la Fuerza Aérea, así como el alto mando policial.
El arzobispo se pronunció por evitar “una lucha eterna destructora de nuestras relaciones” y “empezar a entender que, más que pelearse, lo que importa es ver cuáles son los problemas principales y atenderlos ya”, agregó.
“Hay que hacer el esfuerzo permanente de ver cómo salimos de las situaciones difíciles, tratando de comprender y, a través del diálogo, establecer formas de unidad que impliquen la capacidad, la nobleza de abrirse al Otro y dejar lo propio en favor del bien común”, expresó.
Monseñor Castillo aseveró también que lo que sostiene al país es la solidaridad y el desprendimiento y calificó como “el oro del Perú” a la solidaridad entre los pobres.
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