El ministro de Justicia, Ronald Lamola, declaró en conferencia de prensa que se espera que esa iniciativa reduzca las violaciones de los derechos humanos contra las trabajadoras sexuales que, según asociaciones, suman 150 mil en el país.
Lamola precisó que un mejor acceso a la atención y protección, condiciones de trabajo y menos discriminación contra ese grupo poblacional también está contemplado en el documento, aunque no regula la industria del sexo.
Según cifras policiales publicadas en noviembre, el número de violaciones y agresiones sexuales aumentó un 13 por ciento entre 2017-2018 y 2021-2022. Cada 12 minutos es denunciada una violación, pero existe un número desconocido de hechos similares que no llegan a las autoridades.
La violación de ocho mujeres en julio pasado y el descubrimiento de seis cadáveres en un edificio de Johannesburgo en octubre, algunos de ellos se cree eran prostitutas desaparecidas, fue uno de los incidentes más recientes que conmocionó a la opinión pública.
El presidente Cyril Ramaphosa, confirmó que los asesinatos de mujeres aumentaron al 52 por ciento en los primeros tres meses del año en comparación con el mismo período del año pasado.
Declaró que la violencia de género debe considerarse la principal “pandemia” que afecta al país, porque no pasa un día si informarse nuevos crímenes “horrorosos” en los medios.
El proyecto de ley después de la consulta popular será sometido a la aprobación del parlamento, un proceso que podría llevar varios meses.
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