La granja en Misawa, donde se identificó el virus, posee la mayor población de gallinas ponedoras de la demarcación nipona, precisó el Ministerio de Agricultura, Silvicultura y Pesca (MAFF).
Aomori pidió la colaboración de las Fuerzas de Autodefensa para la ejecución de los pollos, un proceso que podría demorar alrededor de un mes debido a su envergadura.
Como parte de las medidas preventivas, las autoridades prohibieron el movimiento de animales entre las instalaciones avícolas de la región dentro de un radio de 10 kilómetros y habilitaron cuatro puntos de desinfección en la zona.
De acuerdo con el MAFF, también en la prefectura de Chiba se exterminarán aproximadamente 1,16 millones de aves para un total nacional de 6,09 millones.
La propagación de la influenza de tipo H5, extendida ahora en 17 prefecturas, inició a finales de octubre pasado en granjas avícolas de Okayama y Hokkaido.
A juicio de expertos, si el brote continúa a este ritmo, la matanza selectiva de esta temporada invernal podría superar el récord de 9,87 millones de 2020-2021, con pérdidas económicas cuantiosas para los productores japoneses.
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