De las 47 prefecturas japonesas, la de mayor incidencia fue Tokio (119 mil 934) seguida por Aichi (73 mil 321), Kanagawa (71 mil 467) y Osaka (69 mil 661), comunicó el Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar (MHLW).
De acuerdo con el organismo, el país llegó en la presente jornada a casi 28,3 millones de contagios desde el inicio de la pandemia.
En cuanto a los decesos, el acumulado nacional sumó otros dos mil 52 y totalizó 55 mil 593 víctimas mortales de la enfermedad.
Expertos del MHLW consideran que Japón, con más de 125 millones de habitantes, enfrenta una octava ola pandémica, con predominio de la subvariante BA.5 de Ómicron, aunque la cepa mutante BQ.1 podría convertirse en la próxima corriente principal debido su gran capacidad para eludir el sistema inmunitario.
Por segunda semana consecutiva las infecciones superaron el millón en el país asiático y las autoridades advirtieron que la crisis podría agravarse más mientras aumentan los viajes y las interacciones ciudadanas a propósito de los festejos de fin y comienzo de año.
Asimismo, el panorama se complica dentro los centros de salud, donde la embestida del virus respiratorio afecta buena parte del personal sanitario. Esta situación, unido a la apretada disponibilidad de camas, dificulta la hospitalización de nuevos pacientes y la atención médica general.
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