El temporal causó grandes estragos en territorio neoyorkino, que simulaba una “zona de guerra”, con incidentes de saqueo y carreteras bloqueadas por vehículos de emergencia, expresó la gobernadora Kathy Hochul, citada por ese medio.
Las tormentas de nieve y la lluvia helada también dejaron sin suministro eléctrico a miles de residentes, con 15 mil afectados, dijo la funcionaria.
Es posible que la restauración no ocurra hasta mañana martes, aclaró. Añadió cómo hasta el momento se desplegaron miles de recursos materiales para hacer frente a la emergencia, que probablemente incluyó, según sostuvo, “la mayor movilización de equipos de servicios públicos en la historia del estado”.
De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional, durante esta mañana una banda de nieve con efecto de lago pesado en el área de Buffalo producía más de siete centímetros (cm) de nieve por hora, con acumulaciones que alcanzaban 30 cm y hasta los 60 cm para los condados de Jefferson y el norte de Lewis.
El efecto lago ocurre cuando masas de aire gélido pasan sobre grandes depósitos de agua cálida, lo que hace que la humedad y el calor se transfieran a las partes bajas de la atmósfera, el aire se eleve para formar nubes y genera una intensa nevada.
Desde mediados de la semana pasada, las temperaturas comenzaron a desplomarse desde el este de las Montañas Rocosas hasta los Apalaches y enormes ventiscas obligaron a las personas a permanecer dentro de sus hogares y cancelar sus viajes en todo el país, que ya registra fallecimientos en 12 de sus estados, apuntó el reporte de NBC News.
El mal tiempo castigó asimismo al sistema de transporte aéreo que sufrió miles de cancelaciones y demoras desde el pasado miércoles, acorde con el sitio web de seguimiento FlightAward. El Servicio Meteorológico Nacional pronosticó que persistirán las condiciones de viaje peligrosas, aunque informó sobre una disminución lenta a medida que se acerque el año venidero.
“Gran parte del este de la nación permanecerá congelada hasta hoy antes de que se establezca una tendencia de moderación el martes”, remarcó en un boletín.
Mientras tanto, las partes occidentales del país también se preparaban para una tormenta entrante, y los meteorólogos advirtieron de un “potente aumento de la humedad” en el noroeste del Pacífico y California para mañana, con amenazas de inundaciones repentinas.
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