La película narra los cambios en la vida de un viudo de más de 60 años, gruñón, a partir del momento en que a su vecindario se muda un matrimonio latino, que le devuelve las ganas de vivir.
Esta es la segunda adaptación cinematográfica de la novela Un hombre llamado Ove, del escritor sueco Fredrik Backman, en cuya obra se adentra en el mundo de la soledad en que habitan muchas personas ancianas.
Además de interpretar al protagonista, Hanks es productor del largometraje junto a Sony Pictures, que también se encarga de su distribución.
El elenco lo integran los mexicanos Manuel García-Rulfo y Mariana Treviño, en el papel de la pareja que llegan a vivir junto a sus dos hijas en las inmediaciones de Otto.
Según la sinopsis, entre los vecinos aparecen afroamericanos, un personaje transexual y otro con sobrepeso, quienes desde sus actuaciones desmontan los clásicos estereotipos que en muchos casos los rodean en la vida real.
La cinta fue rodada en Canadá y la dirección del equipo de realización mantuvo a los intérpretes conviviendo juntos durante semanas, lo que facilitó la conexión entre los actores.
Este ha sido un año de mucho trabajo para Hanks, quien participó en Elvis, uno de los éxitos de 2022, y se metió en la piel de Geppetto en la versión de Pinocchio dirigida por el cineasta Robert Zemeckis.
Considerado uno de los intérpretes más reconocidos de Hollywood, Hanks (66 años) ha ganado importantes premios de cine, entre ellos dos Oscar consecutivos por Philadelphia (1993) y Forrest Gump (1994). lam/mml