La medida forma parte de una reforma al sistema de ayuda social que entró en vigor este primero de enero y aportará más dinero a los parados de larga duración, así como una intensificación de los esfuerzos para que reingresen en el mercado laboral.
Los renovados términos de la ayuda, que a partir de ahora se llamará Bürgergeld (Dinero del ciudadano), contemplan que una pareja que viva junta reciba en total 902 euros, 451 euros por cada uno.
Además, por cada niño menor de seis años, se le otorgarán 318 euros; entre los siete y los 14 años, 348 euros, y entre los 15 y los 18 años, 420 euros.
Otro punto positivo tiene que ver con que, mientras en el sistema anterior quien percibía ayuda social tenía derecho a los costos de arriendo en una vivienda «adecuada a sus necesidades», ahora tendrá 12 meses en los que puede seguir viviendo en su vivienda anterior antes de que se examine si está es adecuada o demasiado grande.
Por otra parte, en el pasado el monto de las ayudas solo se adaptaba al alza de costo de vida retrospectivamente, teniendo en cuenta la inflación del último año, pero ahora esto se hará por anticipado teniendo en cuenta las estimaciones de inflación.
El recién estrenado sistema es resultado de la labor desarrollada por el Partido Socialdemócrata (SPD) para dejar atrás un aspecto emblemático de lo que fue la llamada Agenda 2010 del canciller Gerhard Schröder.
Sin embargo, los ambiciosos planes de desmantelar por completo las medidas para desempleados aprobadas previamente no pudieron concretarse, debido al bloqueo de la oposición cristianodemócrata en la Cámara alta.
Por tanto, la posibilidad de sanciones, que se pretendía eliminar al menos durante los primeros seis meses como muestra de confianza a los ciudadanos, permanece.
En caso de que alguien no cumpla con sus compromisos de esforzarse por buscar trabajo, puede sufrir recortes en las prestaciones de entre el 10 y el 30 por ciento.
Los esfuerzos de mediación para las personas con baja capacitación sí deberán reorientarse, según la reforma. Para el ministro de Trabajo, Hubertus Heil, eso debe llevar a que la gente encuentre trabajos duraderos.
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