Con el arreglo para finalizar las hostilidades, comenzó un período de estabilidad y el proceso de restablecimiento de los servicios públicos, lo cual regeneró el interés por viajar a regiones septentrionales, asegura una comunicación ministerial.
Debido a su antigüedad, importancia cultural, religiosa y arqueológica, entre otras características, Afar, Amhara y Tigray, los más afectados por la guerra iniciada en noviembre de 2020, son estados con muchas atracciones para los turistas.
Para destinos turísticos en esas norteñas regiones, donde se encuentran patrimonios mundiales, existe una oportunidad adicional y sobre todo en estas fechas, cuando el flujo turístico alcanza su apogeo, subraya el texto publicado en la página oficial de la entidad.
Enero es un mes en el que los etíopes visten ropas coloridas y se elevan espiritualmente, en el que los extranjeros se inspiran, es un momento ideal para las vacaciones y el entretenimiento allí, señala.
De acuerdo con informes oficiales, el sector turístico sufrió el impacto de la Covid-19 y el enfrentamiento armado en áreas del norte, pero ya inició el camino de la recuperación.
Más de un cuarto de millón de turistas visitaron Etiopía el primer trimestre de nuestro calendario, declaró recientemente la ministra de Estado para el Turismo, Selamawit Dawit, en declaraciones a la Agencia de Noticias Etíope.
Y, añadió, la cantidad de visitantes crecerá “porque el gobierno ha estado trabajando arduamente en la formulación de políticas y estrategias que desarrollan el sector”.
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