Los legisladores de las bancadas Perú Libre, Perú Democrático, Juntos por el Perú, Bloque Magisterial y Perú Bicentenario, corearon diversos lemas de condena al Gobierno, sobre todo por las 46 muertes registradas en protestas antigubernamentales.
Los colocaron además en medio el hemiciclo carteles con los nombres de parte de los caídos y reclamos de cesar las muertes y castigo para los responsables y, de pìe, encararon a los ministros sentados en la primera fila por su responsabilidad en las muertes.
Las bancadas de extrema derecha gritaban “terroristas” a los opositores, hasta que el presidente conservador del Congreso, José Williams, intentó hacer callar a los parlamentarios, sin conseguirlo, por lo que dispuso un receso. Al reanudarse la sesión, los izquierdistas la habían abandonado para protestar con su ausencia.
Previamente, el gabinete fue recibido con gritos de “¡asesinos!” al ingresar al Congreso de la República a exponer sus planes y pedir el voto de confianza que necesita para mantenerse en funciones.
“¡Fuera del Congreso, asesinos!”, bramó el legislador de izquierda Jaime Quito, mientras enarbolada un cartel con una inscripción similar, aludiendo a los 46 muertos durante las protestas, de los cuales 18 perecieron en ayer y hoy en la región surandina de Puno.
“¡Váyanse a la cárcel, asesinos!, si a ustedes no les vale los muertos, a mí sí!”, continuó, sin que reaccionaran los titulares, encabezados por el primer ministro, Alberto Otárola, que llegaban por el voto de confianza confirmatoria que esperan recibir de las bancadas de derecha extrema y sus aliados de centro.
De otro lado, cuatro congresistas representantes de Puno pidieron ayer a gritos ante el Palacio de Gobierno la renuncia de la mandataria, principal demanda de los bloqueos, huelgas, marchas y otras acciones en diversas regiones.
Los legisladores puneños Flavio Cruz, Óscar Zea, Carlos Zeballos y Wilson Quispe, se apostaron en la fachada de la sede presidencial y gritaron “¡Alto al fuego!, ¡Renuncia!, ¡No mates al pueblo!, ¡Puno te repudia!”, mientras alzaban carteles con similar contenido.
Entretanto, la congresista progresista Ruth Luque pidió que la fiscal de la Nación, Patricia Benavides, procese con celeridad su denuncia contra la presidenta por las muertes y actúe con la misma intensidad que demostró contra el expresidente Pedro Castillo.
De otro lado, las bancadas parlamentarias progresistas, en una conferencia de prensa, anunciaron que votarán contra la confianza en el gabinete de Boluarte, quien asumió el cargo el 7 de diciembre, tras la destitución y prisión del presidente Pedro Castillo.
Desde entonces, los muertos en protestas, la gran mayoría por proyectiles de armas de fuego, suman 46, lo que ha multiplicado los pedidos de renuncia de la gobernante.
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