Ante el dilema de que estar de acuerdo o no con la convocatoria de una asamblea que cambie la constitución, 69 por ciento, más de dos tercios, respondieron positivamente y 27 por ciento en contra.
Sobre los alcances de la asamblea planteada por las grandes protestas que vive Perú, 40 por ciento creen que debe cambiarse la constitución completamente y 45 por ciento que debe ser modificada.
Solo 12 por ciento opinan que la carta magna de contenido neoliberal, aprobada hace casi 30 años, debe ser preservada como está, como sostiene la mayoría del parlamento -desaprobado por 88 por ciento de la población- que ha bloqueado iniciativas para un referendo que decida si debe convocarse o no la asamblea.
IEP hizo notar el hecho que -pese a una constante campaña mediática y política que sostiene que sin la constitución actual sobrevendrán el caos y el fracaso económico- en mayo pasado solo 45 por ciento de encuestados eran partidarios de convocar a la constituyente.
Sobre los cambios que la asamblea debería aprobar, 74 por ciento planteó el restablecimiento del servicio militar obligatorio y 72 por ciento dictar la pena de muerte para autores de delitos muy graves.
Además, 51 por ciento opinó que la nueva carta magna o la reformada determine que las principales industrias y empresas sean estatales, lo que prohíbe la actual constitución, que solo permite emprendimientos estatales en sectores de la economía en los que no haya empresas privadas interesadas.
Otras opiniones proponen despenalizar el aborto (32 por ciento) y legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo (22).
El analista político Martín Tanaka opinó que incluso quienes quieren una reforma constitucional, prefieren que lo haga la asamblea constituyente, porque no confían en el impopular Parlamento que controlan bancadas de extrema derecha y aliados de centro-centro derecha.
En opinión del politólogo Anthony Mdina, “las clases populares piden constituyente como última instancia para lograr un pacto que acabe el ciclo de inestabilidad que vivimos desde 2016”.
Para la consultora Giovanna Peñaflor, la encuesta refleja que “buena parte de los peruanos entiende que las elecciones inmediatas no solucionarán los problemas”, en referencia a la demanda de las protestas que, además de pedir la renuncia de la presidenta Dina Boluarte, piden que este año haya elecciones generales adelantadas.
jcm/mrs
