Tal efeméride apareció como idea de una agencia de comunicación, que dio forma a una campaña para un restaurante de Madrid (España) especializado en dicho producto, reseñan algunas crónicas.
Se dice que la palabra croqueta proviene de la onomatopeya croquer, que en francés significa crujir y es el sonido apropiado para este riquísimo plato al entrar en contacto con el paladar.
En realidad, la fecha de su nacimiento carece de verificación real. Hay quienes dicen que fue una idea del chef de la corte de Luis XIV en el año 1619 y otros le atribuyen el invento gourmet al fundador de la cocina clásica, Monsieur Escoffier, en 1898 (nadie discute su paternidad francesa).
El primer registro histórico donde se ve reflejado este manjar, data del año 1817, específicamente el día 18 de enero.
Ello ocurrió cuando Antonin Cáreme, decidió presentar un plato de croquetas en un banquete para el príncipe regente de Inglaterra y el Gran Duque Nicolás de Rusia. Aquello maravilló de tal forma a los nobles que el plato fue bautizado con el nombre de Croquettes à la royale (Croquetas reales).
En cuanto a ingredientes, las hay muy variadas, de pollo, queso, jamón, sardinas, tofu, camarones y hasta chocolate. El verdadero secreto está en cómo se fríe, dicen los entendidos.
Por tanto, la croquette es una especie de fritura en pequeños trozos, ovalada con carne picada sea de ternera, gallina, o jamón, mezclada con leche y otro ingrediente, amasada con huevo y harina o pan rallado, que también puede ser de pescado, arroz con leche y crema.
La croqueta no se menciona en España hasta el libro de Altimiras de inicios del siglo XX, y en clásicos para las recién casadas en el primer tercio del mismo siglo, en estos casos a partir de pollo, conejo, merluza o bacalao.
Lo que parece cierto es el enriquecimiento de esta receta en la península Ibérica, pues consideran a la croqueta francesa como grande y dura, mientras las españolas son pequeñas, blandas y suaves.
En la actualidad, es un plato barato, de pobres, y hasta para algunos franceses consiste en alimento de perros. Pero lo que sí es cierto, es que dicha receta pulula en varias naciones y a muchos gusta, y en otros casos se deja para fiestas, como bodas y cumpleaños, o en mesas finas, cuando realmente puede resolver problemas de falta de alimentos.
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