El oficial de relaciones públicas de las fuerzas de seguridad estadual, Dambo Isah, declaró a la prensa local que durante los asaltos, ocurridos horas atrás en los distritos de Guga, Kakumi, Kandarawa y Jargaba, los considerados bandidos emplearon fusiles AK-47 y otros tipos de armas.
La mayor parte de las muertes tuvo lugar cuando los bandidos emboscaron un convoy de vigilantes voluntarios, los cuales intentaban recuperar un lote de ganado robado en un bosque, reseñaron informes.
En Katsina y otros estados de Nigeria en los últimos meses aumentaron las embestidas contra diversos objetivos por entes delincuenciales y grupos extremistas, lo que aumenta el clima de inseguridad en este territorio, con una población ascendente a unos 216 millones de habitantes.
Ante esa compleja situación, las tensiones se incrementan, en un contexto considerado delicado a escasos días de que el próximo día 25 se celebren elecciones presidenciales y legislativas.
Precisamente el candidato presidencial del gobernante Partido de Todos los Congresistas, Bola Tinubu, en un acto de campaña en Katsina, prometió que de llegar a ser mandatario, combatirá el bandidaje “hasta que vuelva la normalidad a este estado y al país”.
Según recientes datos oficiales, desde 2022 hasta la fecha, en Katsina fueron asesinadas más de dos mil 300 personas, en tanto una elevada cifra resultó secuestrada.
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