Según la oficina presidencial, Vucic habló con el alto funcionario de la OTAN sobre la cooperación en el marco de la neutralidad y se pronunció por el diálogo para fortalecer la confianza mutua.
Asimismo se informó que Colomina expresó el apoyo de la Alianza Atlántica al plan serbio de unirse a la Unión Europea.
El pasado 2 de febrero, durante una reunión especial de la Asamblea (Parlamento) de Serbia, Vucic negó toda posibilidad de convertir al país en miembro de la OTAN, y aseguró que la nación balcánica mantendrá una posición de neutralidad militar.
Analistas internacionales recuerdan esta jornada que los serbios no olvidan que esa Alianza belicista agredió en 1999 a la entonces República Federativa de Yugoslavia con un ataque que comenzó el 24 de marzo y duró 78 días.
Como razón principal de la operación ofensiva, el liderazgo de la OTAN llamó a la prevención de un supuesto genocidio de la población albanesa en Kosovo.
De acuerdo con las fuentes de la propia OTAN, sus fuerzas ejecutaron 38 mil incursiones y 10 mil bombardeos dejando un negativo saldo de alrededor de cuatro mil personas asesinadas y unos 10 mil heridos.
Asimismo, en los bombardeos se emplearon 15 toneladas de uranio empobrecido, lo cual aumentó de manera acelerada los casos de cáncer, por lo que los daños no solo afectaron a una generación sino que permanecen latentes.
mem/fvt