Según el análisis de la Liga Antidifamación (ADL en inglés), todos los asesinatos cometidos por radicales identificados en 2022 estaban relacionados con las ideologías de derecha, con un número especialmente alto asociado con la supremacía blanca.
Se incluye ahí un tiroteo masivo racista en un supermercado en Buffalo, Nueva York, que dejó 10 compradores afrodescendientes muertos, y otro que privó de sus vidas a cinco personas en un club nocturno de la comunidad de Lesbianas, Gais, Bisexuales y Trans en Colorado Springs, Colorado.
«No es una exageración decir que vivimos en una era de asesinatos en masa extremistas», dice textualmente el informe del Centro de Extremismo de la ADL.
Entre dos y siete de estos hechos ocurrieron cada década desde 1970 hasta la de 2000, pero a partir de 2010 ese número se disparó a 21, según el informe.
Desde entonces, la tendencia es creciente con cinco asesinatos en masa cometidos por extremistas en 2021 y 2022, tantos como los registrados durante la primera década del nuevo milenio.
Entre 2010 y 2020, 164 personas murieron en matanzas relacionadas con el radicalismo ideológico, según el informe.
Eso, apuntó, es mucho más que lo visto en cualquier otra década excepto en la de 1990, cuando el bombardeo de un edificio federal en la ciudad de Oklahoma mató a 168 individuos.
Los extremistas domésticos plantean problemas significativos en el país que van desde la incitación y el acoso, hasta los delitos de odio y el terrorismo, apuntó la fuente.
De los 25 asesinatos relacionados con ultraderechistas en los Estados Unidos en 2022, el 60 por ciento fueron víctimas de ataques masivos, y el noventa y tres por ciento de estos se cometieron con armas de fuego, reveló el estudio.
“El aumento en el número de intentos de asesinatos en masa es una de las tendencias más alarmantes de los últimos años”, dijo a propósito del hallazgo el vicepresidente del Centro sobre el Extremismo, Oren Segal.
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