Acorde con la fuente, las armas de fuego ocasionaron desde enero y hasta la fecha siete mil 513 fallecimientos, de los cuales tres mil 223 se corresponden a asesinatos, homicidios y muertes accidentales, mientras los suicidios donde se emplearon esos artefactos suman cuatro mil 290.
Según apuntó la fuente, los disparos cegaron la vida de 302 menores de 17 años, al tiempo que 740 resultaron lesionados.
Aunque los tiroteos se registran en casi todos los estados, los incidentes de violencia armada se concentran fundamentalmente en la mitad oriental del país, reflejó.
Estados Unidos experimenta desde 2020 más de 600 tiroteos masivos cada año lo que implica un aumento de más del 75 por ciento en relación a esos eventos entre 2016 y 2022, acorde con las estadísticas del sitio.
Solo el pasado año, por ejemplo, seis mil 32 niños de hasta 17 años fueron víctimas de la violencia armada, el número más alto registrado en un solo año desde que Gun Violence Archive comenzó a rastrear los reportes en 2014.
En general, durante 2022, 43 mil 675 personas murieron a causa de las armas de fuego, 19 mil 849 relacionadas con homicidio, asesinato o causas no intencionales y 23 mil 826 clasificadas como suicidio.
Un estudio de la revista médica JAMA Network Open alertó el pasado año que más de un millón de personas murieron intencional y accidentalmente por un arma de fuego entre 1990 y 2021 en Estados Unidos.
Los hallazgos mostraron que los decesos causados por dicho artefactos letales fueron de aproximadamente 10 por cada 100 mil habitantes en 2004, pero esa tasa comenzó a subir a partir de 2010, hasta alcanzar 14,7 muertes por armas de fuego por cada 100 mil individuos en 2021.
El total de ciudadanos que perdieron los vida en los 30 años que abarcó la indagación fue de un millón 110 mil 421, divulgaron los autores.
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