Las brigadas de maquinistas de Pyongyang y Pyongyang Oeste examinan el estado de las locomotoras en circulación y aplican métodos avanzados de manejo según el estado técnico de ferrocarril.
De igual forma, organizan la distribución de vagones conforme al estado de aseguramiento de cargas, toman las medidas para solucionar los problemas surgidos en los procesos de monte y desmonte, y forman de manera racional el convoy para transportar cargas superiores al plan.
Varias estaciones redujeron al máximo el tiempo de parada de los trenes; mientras que los guardavías de otras entidades garantizan la seguridad de la circulación mediante la reparación de elementos defectuosos.
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