Ambos empresarios, primos del gobernante puertorriqueño Pedro R. Pierluisi, evitarán con su admisión de responsabilidad inflar órdenes de compras en la administración de complejos habitacionales públicos, donde tuvieron contratos desde la segunda mitad de la década de los 90 del siglo pasado, generando millones de dólares para su beneficio.
Los dos hombres deberán comparecer este jueves en la sala de la jueza federal Camille Vélez-Rivé, para evitar su arresto y que un gran jurado emita acusaciones en su contra por cargos de corrupción con fondos federales, ya que no será hasta entonces que se conozcan los cargos.
Los empresarios se declararán culpables de malversar 3,7 millones de dólares de fondos federales, destinados a la administración de residenciales públicos en Puerto Rico.
“Me apena la situación porque son primos míos, pero me molesta de igual manera porque toda corrupción es reprochable, todo acto de corrupción es repudiable venga de donde venga incluyendo de mis familiares, me apena porque estamos hablando de familia, pero aquí no hay excepciones”, dijo el mandatario boricua, quien hace varias semanas los calificó de “parientes lejanos”.
A pesar de este planteamiento, la realidad es que los Pierluisi Isern estuvieron involucrados en las campañas electorales de su encumbrado pariente, quien antes de ser gobernador ocupó por ocho años —dos términos— la banca de comisionado residente de Puerto Rico en el Congreso Federal en Washington.
“Algo que también me apena es que mis primos llevaban casi 30 años administrando residenciales públicos y que esto acabe de esta forma a mi me duele y me apena”, subrayó.
Con la acusación estipulada por la fiscalía federal, junto a los parientes del mandatario boricua será imputado el director de finanzas de American Management, David Vélez Hernández, aunque en fecha posterior.
Hace unos meses, miembros del Buró Federal de Investigaciones (FBI) asistieron a agentes de la Oficina del Inspector General del Departamento de Vivienda de Estados Unidos (OIG-HUD) en el allanamiento de la empresa American Management and Administration Corporation, de los hermanos Pierluisi Isern, y su bufete de abogados.
Aunque el gobernador boricua aseguró que este caso nada tiene que ver con su campaña política, Pierluisi marcó distancia luego que su amigo de la infancia Joseph Fuentes fuera condenado a 14 meses de prisión, tras crear un comité de acción política (Salvemos a Puerto Rico) para desacreditar a sus oponentes, en particular a la exgobernante Wanda Vázquez Garced.
npg/nrm