“Su sabiduría y lucidez revolucionaria, así como su incansable lucha en favor de nuestros pueblos son fundamentales para nuestra Revolución Democrática y Cultural”, aseguró Arce en su cuenta de Twitter.
En su libro Geapolítica del vivir bien, recientemente publicado, Choquehuanca resume estudios realizados durante años e insiste en la necesidad planetaria de asumir un paradigma biocéntrico.
“No podemos seguir siendo testigos indolentes del fin de la humanidad y del fin de la Madre Tierra”, ha insistido en diversas presentaciones de esta obra.
Según el vicepresidente, los tiempos de crisis como la que hoy sufre en forma múltiple el capitalismo, implican la generación de nuevas ideas, y ese es el sentido de su propuesta, que pone en marcha la descolonización de la geopolítica de la civilización occidental y la llamada modernidad.
Advierte en la obra que el capitalismo esclavizó a todo lo vivo y esto generó un caos planetario visible en múltiples crisis (climática, hídrica, sanitaria, económica, migratoria).
Esa visión ecocida avanzó y se expandió con el poder militar e ideológico de los imperialismos, recuerda.
Sin embargo, observa el autor, esta realidad no puede eliminar las fuerzas que desde los márgenes de la geopolítica de dominación se articulan para resistir al sistema mundial capitalista, neocolonialista, racista y monárquico.
“Frente a la geopolítica de dominación y sometimiento -asevera Choquehuanca-, emerge la geapolítica del vivir bien desde la rebeldía de los pueblos, desde el corazón de nuestra Pacha Mama, desde el indomable Abya Yala (tierra madura de la eterna juventud en permanente renovación).
Concluye el vicepresidente que esta concepción tiene como objetivo restaurar el camino de la hermandad, de la complementariedad, del consenso, de la armonía y de la paz, ubicando en el centro de la acción política nacional e internacional a Gea, Pacha Mama, la Madre Tierra.
jha/jpm