Un comunicado de la empresa señaló que tal baja aparece con pérdidas netas de 223 millones de euros de enero a marzo de 2023.
El año anterior la empresa obtuvo un beneficio neto de 565 millones de euros. Thyssenkrupp tuvo que amortizar casi 350 millones de euros en su negocio siderúrgico.
Los ajustes de valor se debieron a la subida de los tipos de interés y al consiguiente aumento del coste del capital, explicó el grupo.
El aumento de los costos de las materias primas y la energía, así como el descenso de los precios del acero, situaron el resultado ajustado antes de intereses e impuestos (Ebit) en 205 millones de euros, muy por debajo del nivel del año anterior, 802 millones de euros.
Por demás, el área comercial y la división siderúrgica registraron pérdidas considerables. La filial Steel Europe registró números rojos (la facturación de esta filial del grupo cayó ligeramente de 10 mil 600 millones a 10 mil 100 millones de euros).
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