Luego de varios días de avances de la probable candidatura del exmilitar y abogado Luis Parada, residente en Estados Unidos, y Celia Medrano, él exarenero y ella exefemelenista, el Partido Nuestro Tiempo anunció que ambos se apuntaron en esa tolda y próximamente inscribirán su candidatura a la presidencia.
El integrante de la organización Resistencia Ciudadana, el exdiplomático Rubén Zamora, exteriorizó su desacuerdo sobre que ambos sean presentados como una candidatura de consenso aunque no descartó un respaldo futuro.
Zamora, uno de los integrantes del movimiento que busca una dupla de unidad, explicó que no pueden respaldar dicha fórmula porque se rompió el acuerdo que implicaba analizar otras dos candidaturas propuestas por Resistencia.
Aunque el exdiplomático indicó que el objetivo “no es generar pleitos y menos romper el debate entre las organizaciones”, es evidente que no hay un avance hacia la unidad que buscan para sacar a El Salvador del deterioro democrático. Hay contradicciones.
José Marinero, abogado y uno de los voceros del colectivo SUMAR, el cual ha liderado estas conversaciones entre actores de sociedad civil y partidos políticos también abordó el problema y la falta de unidad.
SUMAR es, ante todo, dijo, un esfuerzo ciudadano. Es un movimiento cívico y plural que reúne a una serie de actores sociales de la academia, representantes de sectores académicos e incluso religiosos, de la diversidad sexual y feministas, profesionales que se reúnen alrededor de la preocupación de qué hacemos frente a lo que nos está sucediendo en este momento.
Según la revista FACTum a ocho meses de las elecciones, “el escenario de 2024 se plantea como una última ventana de oportunidad para plantear una alternativa democrática, ofrecer una alternativa ciudadana y democrática frente a la crisis de democracia que vivimos en este momento”.
Según Marinero, el reto no es competir contra esta persona (Nayib Bukele). El reto es unificar las posiciones de aquellos que en este momento creen que un país distinto es posible. El reto es construir esperanza.
Sin embargo, el escenario es cada vez más contradictorio aunque ya hay indicios de que la mayoría de los partidos irán de forma independiente a los comicios, según expertos, un escenario que favorecerá la continuidad de Bukele.
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