Designado la víspera mediante decreto presidencial, el funcionario sustituyó en el cargo a Manuel Nunes Júnior, cuya exoneración fue por “conveniencia de servicio”, según alegó el documento.
Para asumir la encomienda, De Lima Massano fue liberado de su puesto como gobernador del Banco Nacional de Angola, tarea que asumió en diciembre pasado, con el antecedente de haber ejercido la misma función desde octubre de 2010 hasta enero de 2015.
Al decir de Lourenço se siente «muy esperanzado» por el nombramiento, aunque el funcionario deberá encarar un «dossier delicado», dada las metas del Ejecutivo.
A juzgar por su “rico currículo”, las tareas puede que no sean muy difíciles y, al provenir de la esfera bancaria, sabrá fácilmente movilizar el sector para financiar más a la economía nacional, dijo el mandatario en la ceremonia de toma de posesión.
La economía de cualquier país, razonó, es algo muy importante, tanto o más que la seguridad nacional e, incluso, esta última depende mucho de la salud de la economía.
Para Angola el mayor desafío continúa siendo la diversificación de la producción interna de bienes y servicios, lo cual debe ayudar a reducir la elevada dependencia de los ingresos petroleros, remarcó.
La diversificación, recordó, deberá incluir la transformación en plaza de múltiples recursos minerales, así como el desenvolvimiento de la industria manufacturera a fin de aportar un conjunto de bienes esenciales para la vida de las poblaciones y aumentar la gama de rubros exportables.
mgt/mjm