En unos comicios signados por una baja participación del 25,8 por ciento de unos 237 700 miembros convocados a las urnas, el exgobernante de 71 años alcanzó un nuevo fuero penal electoral, pero que está lejos de impedir que la jueza Baloisa Marquínez dicte sentencia en el caso New Business.
Para Martinelli,y otros 12 imputados,la Fiscalía pide pena máxima de hasta 18 años de prisión por comprar en 2010 —confondos públicos— la mayoría de las acciones de la editora Panamá América, aunque su representación asegura que el desembolso provenía de cuentas privadas.
En un discurso airado ante sus bases cuando ya era irreversible el resultado de las primarias, el multimillonario aseveró que la única forma de sacarlo de la carrera presidencial es con el actual juicio político, contrario a lo que dice la norma que fue aprobada para proteger a los aspirantes que compiten en campaña.
Martinelli llamó en su comparecencia al Tribunal Electoral y a los observadores internacionales a “que hagan respetar la democracia, el fueropenal electoral y la voluntad popular”.
Sin embargo, la letrada Marquínez, tras escuchar los alegatos de la defensa, cerró la audiencia y se acogió al término de 30 días según la ley para emitir su fallo definitivo.
El juicio de alto perfil se desarrolló durante nueve días y fue transmitido por redes sociales. El fiscal Emeldo Márquez sostuvo que los implicados, mediante un complejo esquema de transferencias bancarias a un banco en el exterior, giraron recursos de manera ilícita para la compra de la editorial.
También especificó que se realizaron maniobras de estratificación financiera mediante múltiples transacciones nacionales e internacionales, que recolectaron entre el 15 y 27 de diciembre de 2010 la suma de 43,9 millones de dólares en una cuenta bancaria offshore perteneciente a la sociedad New Business Services Limited.
Además, el exmandatario aún tiene pendiente el juicio por el caso de pagos de sobornos de la consultora brasileña Odebrecht en Panamá, previsto entre agosto y octubre, en el que está imputado junto a decenas de acusados, incluidos sus dos hijos, Ricardo Alberto y Luis Enrique, y el expresidente Juan Carlos Varela (2014-2019).
Martinelli fue extraditado en 2018 desde Estados Unidos a solicitud de la justicia panameña para que enfrentara un proceso por escuchas telefónicas contra políticos, periodistas, líderes gremialistas y figuras de la sociedad civil, pero fue absuelto en 2020 y 2021.
(Tomado de Orbe)