“Se trata de un documento espurio, unilateral e injusto, porque mientras Cuba durante décadas propicia la búsqueda de la paz en Colombia, el complejo militar industrial norteamericano se enriquece con ese conflicto”, aseguró el politólogo Juan Ramón Quintana, conductor del espacio semanal Coordenada Sur.
Quintana recordó que, en 2014, durante la Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños celebrada en La Habana, este continente fue declarado zona de paz.
El programa de análisis geopolítico retransmitió fragmentos del discurso del presidente colombiano, Gustavo Petro, durante el acto conclusivo del Tercer Ciclo de los Diálogos de Paz, instalados desde el 2 de mayo último en La Habana.
Durante su intervención, Petro sostuvo que la isla antillana “recibió una puñalada por la espalda” por parte de un presidente colombiano que propició la inclusión de la isla en esa lista, solo por propiciar la pacificación en la nación sudamericana.
Reveló que sostuvo dicha postura de rechazo a la medida coercitiva de Estados Unidos, ante el propio jefe de la Casa Blanca, Joe Biden, durante una reunión reciente.
“La paz ha traído la vida, el cambio en las instituciones, y la innovación para la sociedad colombiana; en cambio la oposición a la paz trae consigo lo peor para el país”, argumentó el dignatario, quien agradeció a Cuba y a su jefe de Estado, Miguel Díaz-Canel, presente en el acto junto a representantes de los países garantes del proceso.
Los Negociadores del Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional acordaron en Cuba el cese el fuego bilateral durante el Tercer Ciclo de los Diálogos de Paz recién concluidos.
Autor de varios libros, Quintana recordó los objetivos y las estrategias empleadas contra líderes progresistas al amparo de la guerra judicial o parlamentaria, y alertó de ese tipo de planes contra Petro en Colombia.
Instó a que las cancillerías latinoamericanas asuman un papel más activo en respaldo al presidente colombiano, quien en estos momentos es víctima de ese tipo de ataques.
Coordenada Sur enfatiza cada semana en los imperativos políticos que guían esta estrategia de aniquilamiento de líderes progresistas contrarios a los intereses imperiales norteamericanos.
Recordó el exministro de la Presidencia durante tres mandatos del exmandatario Evo Morales que como parte de la Doctrina Monroe esa estrategia se hace más visible en momentos en que el capitalismo imperial vive una de sus peores crisis de dominio hegemónico global ante la emergencia de otras potencias como Rusia y China, que contrapesan el poder unipolar de Occidente.
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