A pocos días de que se cumpla un año de la decisión del Tribunal Supremo del país de retirar la protección federal a la interrupción voluntaria del embarazo, ocurrida el 24 de junio de 2022, el sondeo mostró asimismo que el 52 por ciento de la población apoya dicho procedimiento.
Esa misma cantidad alegó que ve el aborto como moralmente aceptable, mientras que el 41 por ciento lo calificó como incorrecto.
Sin embargo, los estadounidenses se dividen casi por igual cuando se les pregunta si la práctica debería ser legal en la mayoría de las circunstancias o solo en unas pocas.
Mientras el 49 por ciento consideró que el procedimiento solo debería estar disponible en determinadas situaciones o ser completamente ilegal, el 47 por ciento estimó que se debería poder acceder a él en la mayoría o en cualquier circunstancia, detalló la pesquisa realizada a mil 11 adultos.
Asimismo, casi dos tercios de los encuestados por Gallup dijeron que apoyan mantener la píldora abortiva aprobada por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA por sus siglas en inglés) disponible para pacientes con prescripción facultativa.
Según el sondeo, realizado del 1 al 24 de mayo, el 63 por ciento está a favor de permitir que la mifepristona esté accesible como fármaco recetado, mientras que el 35 por ciento de los encuestados alegó que se oponía.
El nuevo estudio surge cuando el tema de la disponibilidad de píldoras abortivas ha vuelto a la atención pública después de que un juez federal en Texas revocó la aprobación de la droga por la FDA.
Tras esa decisión se interpuso una demanda, y la Corte Suprema de los Estados Unidos congeló el dictamen, permitiendo que el medicamento permanezca disponible con receta mientras se desarrolla el proceso de apelación.
De acuerdo con un estudio del Instituto Guttmacher, una organización que apoya el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo, el aborto con medicamentos representó más de la mitad de todos los procedimientos de este tipo realizados en Estados Unidos en 2020.
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