En entrevista este viernes con el canal estatal Bolivia Tv, el jefe departamental del MAS en Santa Cruz, Marco Fernández, elogió ese acto realizado en la Casa Grande del Pueblo (sede gubernamental).
“Del Castillo tuvo los pantalones para encarcelar a los golpistas Jeanine Áñez, Luis Fernando Camacho y encarar el paro con violencia de 36 días en Santa Cruz a finales de 2022”, sostuvo el partidario del Gobierno de Arce.
El ministro fue posesionado luego que fuera destituido del cargo por decreto presidencial 4974, en cumplimiento a los efectos de la censura aprobada el pasado martes en el Parlamento, con votos de legisladores que responden al expresidente Evo Morales y de las opositoras Creemos y Comunidad Ciudadana (CC).
Arce aseguró que esa decisión respeta la Constitución, atiende el mandato popular y responde a quienes buscan “trabar” la gestión gubernamental y “olvidaron” el golpe de 2019, en alusión a los diputados y senadores denominados radicales.
Ante el vicemandatario, David Choquehuanca, legisladores del MAS, dirigentes de la Central Obrera Boliviana y de las organizaciones sociales del Pacto de Unidad, Arce justificó la decisión en el artículo 172 de la Constitución Política del Estado.
Criticó la intención antigubernamental de quienes descalificaron al ministro, en este caso sobre la base de un tema muy alejado a sus verdaderas competencias («robo de vehículos en Chile)”, y denunció que buscan “trabar y entorpecer la gestión, de que salgamos mal parados”.
En referencia a los «masistas» que votaron contra del Castillo, Arce calificó de lamentable que se pusieran de parta de las facciones que encabezan los jefes golpistas de 2019 Carlos Mesa (CC) y el gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho (Creemos).
Al intervenir, Castillo fue más directo en las críticas a los legisladores “evistas” a quienes acusó de traidores y de dar una puñalada por la espalda a la revolución.
Durante la intervención, en la que citó a revolucionarios como Fidel Castro, Che Guevara y al fallecido expresidente Juan Domingo Perón, el titular formuló duras críticas al primer exmandatario indígena de Bolivia, Evo Morales.
En su cuenta de Twitter, Morales, por su parte, pidió que el pueblo boliviano juzgue.
“(…)Hago responsable al ministro censurado y ratificado inconstitucional e ilegítimamente de cualquier atentado contra mi vida o integridad física. La militancia del MAS-IPSP es testigo de las amenazas, mentiras y ataques en nuestra contra”, escribió.
Advirtió que el MAS nunca claudicará en su lucha contra la corrupción y protección al narcotráfico.
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