Este dato lo acotan en términos reales, es decir ajustados a los precios, lo cual significa una modificación de sus previsiones para el año en curso.
Anteriormente, la HDE suponía una caída del tres por ciento. Según las más recientes previsiones, es posible que las ventas nominales aumenten un tres por ciento.
La elevada inflación causa cada vez más problemas en el sector del comercio minorista alemán.
El director general de HDE, Stefan Genth, se refirió a una encuesta de la federación según la cual una cuarta parte de los consumidores alemanes teme no poder subsistir con su dinero.
Dijo que suelen comprar menos, en muchos casos cambian a productos más baratos. En total, el 45 por ciento de la población afirmó en el sondeo que limitará los gastos de algún modo.
La difícil situación general se refleja también en los resultados de una reciente encuesta realizada por la federación entre unas 900 empresas minoristas, informó el presidente de HDE, Alexander von Preen.
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