Para Perelló, en su cuenta en Facebook, el sector turístico americano experimentó grandes transformaciones en el período 2013-2023 tanto en aviación, hotelería como intermediación.
Señala que las quiebras, adquisiciones, emprendimientos o fichajes fueron decisivos para transformar el mapa de la industria en la región a lo largo de esta década.
Una de las tendencias de más impacto para el gremio resultó la toma de control por parte del capital estadounidense de las principales enseñas aéreas de Latinoamérica.
La pandemia de la Covid-19 aceleró esta corriente al convertir en accionistas a acreedores financieros, que permitieron salir de la quiebra a Avianca, Latam y Aeroméxico, unido a socios industriales como Delta o Qatar.
Insiste en su análisis en que el crecimiento de las low cost (bajo precio) marcó igualmente al continente, con la presentación de numerosos proyectos en dicho período, como los de Jetsmart, Arajet, Wingo, Flybondi o Sky, aunque también se registraron sonadas quiebras, como las de Interjet, Viva Air o Ultra Air.
En el campo hotelero destaca la ofensiva de los gigantes estadounidenses por hacerse con proyectos latinos consolidados como Decameron o City Express, a la vez que aceleraron su expansión en un nicho donde no eran dominantes.
Es el caso, aseguró, del nicho vacacional, mediante operaciones como la venta de Apple Leisure a Hyatt, así como a través de alianzas lideradas por Marriott, Radisson o Wyndham.
Por demás, en el terreno emisor, la oleada de concentración tuvo en ese tiempo como más claro exponente la encabezada por Despegar sobre empresas como Bestday o Viajes Falabella, o la de CVC sobre Byblos, Almundo o Avantrip, de igual modo que el de Pricetravel sobre Tiquetesbaratos.
Una conclusión de estos procesos en los distintos sub-segmentos del Turismo, especifica el entendido, es que en este período se acentuó una mayor cohesión en todo el continente, consecuencia de que una competencia de aerolíneas y de capital más saneado lleva la traducción de más conexiones y a menor precio.
Del mismo modo, la creación de gigantes emisores multilatinos favoreció economías de escala que permitieron una mayor inversión en tecnología para que las agencias mejoraran su propuesta de valor.
Perelló concluye sus comentarios en el sentido de que el efecto de la concentración hotelera se aprecia en la notable renovación de su producto con innovadores renglones, y de mayor calidad. El turismo americano, recalca, otorga un importante salto en solo una década en cuanto a solidez financiera y en su profesionalización, a la vez que dispara su conectividad.
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