En el 202 aniversario de la proclamación de la independencia, la capital amaneció bajo fuertes medidas de seguridad a cargo de 30 mil policías, en particular en el centro histórico, donde se realizarán los actos conmemorativos de la efeméride.
El despliegue policial se concentra en la plaza de Armas, donde se encuentra el palacio de Gobierno y desde el cual la presidenta se dirigirá, en un trayecto de cuatro cuadras, hasta el también resguardado palacio Legislativo.
La citada plaza permanece aislada por rejas y un cordón policial establecido a una cuadra de distancia y, desierta, es ocupada solo por policías y militares con uniformes históricos usados para fechas especiales como la presente y hay también francotiradores vigilando desde los tejados.
También se mantiene el resguardo permanente al palacio Legislativo, reforzado ante la inminencia de una marcha convocada por la Coordinadora Nacional de Lucha Unitaria, tras una víspera de intensas protestas en Lima y en el interior del país.
Mientras tanto, en la periferia de la ciudad, donde se encuentran los barrios populares, grupos de manifestantes se concentran para marchar a la céntrica plaza Dos de Mayo, en el Centro Histórico de Lima, trayendo el rechazo a la mandataria reflejado, además, en las encuestas de opinión.
La jornada fue precedida por movilizaciones de agitación y propaganda en las que activistas sociales recorrieron los barrios para llamar a los pobladores a marchar al centro a protestar y también por prontas elecciones generales adelantadas y justicia para los caídos en anteriores protestas.
Esa actividad se hizo sentir con fuerza ayer en el centro limeño, con el despliegue de miles de manifestantes capitalinos y la participación de delegaciones llegadas del interior, donde además hubo protestas en diversos puntos, sobre todo en el sur del país.
En las regiones sureñas de Puno y Arequipa hay bloqueos de carreteras y también otras demostraciones de descontento en esos y otros territorios, continuando una serie de actividades iniciadas el 19 de julio con una masiva marcha en la capital.
Las protestas demandan la dimisión de Boluarte y prontas elecciones generales, justicia y sanción para los autores y responsables de más de 60 muertes registradas durante las manifestaciones desatadas tras el ascenso de la mandataria al cargo, el 7 de diciembre de 2022.
También reclaman una asamblea constituyente y el retiro de tropas norteamericanas llegadas al país en junio pasado, entre otras demandas.
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