Las fuentes radicadas en la localidad de Yarubieh en el nordeste de la provincia de Hasakeh, revelaron que los militares del Pentágono sacaron hacia el vecino Iraq un convoy de 45 camiones cisterna cargados con petróleo de los yacimientos nacionales.
Mientras una segunda caravana compuesta por 50 camiones y contenedores cargados de salvado de trigo robado de los silos de Yarubieh, ingresó en territorio iraquí y se dirigió hacia los enclaves de Washington.
Siria producía antes de la guerra, en 2011, más de 380 mil barriles diarios de crudo, pero esta cifra se redujo a solo 80 mil, 66 mil de los cuales son saqueados por las tropas norteamericanas y su milicia separatista Fuerzas Democráticas de Siria (FDS).
Esta nación producía también cantidades suficientes de trigo para su consumo y la exportación, pero la producción se redujo de cinco millones de toneladas a poco más de un millón debido a la salida de casi de un millón de hectáreas del plan por estar en zonas ocupadas por Estados Unidos.
La Cancillería siria denunció la intensificación del saqueo y contrabando de las riquezas naturales del país y consideró estas acciones como bandolerismo que viola el derecho internacional, empobrece al pueblo sirio y prolonga su sufrimiento.
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