“Históricamente la población está abandonada y dejada de lado, mirada con desdén, por eso el compromiso de este Gobierno, es mirar con cariño y amor, pero sobre todo con responsabilidad y llegar ahí donde la población necesita ser atendida”, afirmó.
Aseguró que su administración invertirá, que más el dinero de los impuestos en beneficio de la población vulnerable, la que más lo necesita y lo hará “sin robar un sol al pueblo peruano”.
La mandataria visitó la provincia arequipeña de Camaná, donde asistió a la inauguración de la ampliación de capacidad de una subestación eléctrica.
Dijo también que el Gobierno trabaja poniendo por adelante el amor, la paz y la unidad, sin odios, ni rencores, ni violencia, porque estos tres últimos generan pobreza y atraso.
Durante su visita a Camaná, según denunció la filial regional de la Asociación Nacional de Periodistas, la Policía impidió acceder al acto oficial a los reporteros lugareños.
La misma fuente indicó que un grupo de pobladores que coreaban consignas contra la presidencia fueron bloqueados y dispersados por policías, mientras otro uniformados mantenían a raya a los reporteros para que no registren el incidente.
La mandataria enfrentó la semana pasada una nueva serie de protestas en demanda de su renuncia, nuevas elecciones adelantadas y castigo para autores y responsables de las más de 60 muertes en una anterior ola de manifestaciones con las mismas demandas.
Esas demandas obtuvieron apoyo mayoritario en diversas encuestas en las que la jefa de Estado fue desaprobada hasta por 91 por ciento de los consultados.
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