Tal acuerdo permitirá la gestión y coordinación del trabajo de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA).
“Es importante mencionar que nuestro país ha propuesto la creación del mecanismo de presidentes que no existía hasta ahora. La Declaración ha dado el mandato para que los ministros de Relaciones Exteriores de los países miembros trabajen en la creación de este mecanismo”, informó Mamani a la prensa.
Según el viceministro, lo acordado facilita que se puedan efectuar reuniones periódicamente para dar lineamientos de protección de la Amazonía; “también se ha incorporado la creación del Mecanismo de Pueblos Indígenas”, agregó Mamani.
Los aportes fueron elaborados y gestionados para su incorporación en la Declaración de Belem por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia con el canciller, Rogelio Mayta, a la cabeza.
El documento que debe su nombre a la ciudad brasileña en la cual se reunieron los jefes de Estado de la OTCA fue suscrito el martes último por los mandatarios y representantes de Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela.
Sus 113 párrafos constituyen una hoja de ruta que tienen como objetivo frenar la deforestación de la selva tropical más grande e importante del mundo.
Resalta el texto, entre otros asuntos, la importancia de las reuniones de los presidentes de los Estados Parte de la OTCA, como mecanismo estratégico para la adopción de decisiones y con una regularidad en sus encuentros.
Además, encomienda a los ministros de Relaciones Exteriores la negociación de un protocolo adicional al Tratado de Cooperación Amazónica (TCA), que establezca estos foros presidenciales.
De igual forma, establece el Mecanismo Amazónico de los Pueblos Indígenas a fin de fortalecer y promover el diálogo entre los gobiernos y los pueblos indígenas que habitan en esta región, respecto asuntos que conciernan y contribuyan a la OTCA.
La aprobación de esta propuesta implica también la creación de una reunión de pueblos indígenas y comunidades locales que contribuyan, desde su conocimiento e información, a la preservación y sostenibilidad de la Amazonía.
En Belem, el presidente Luis Arce propuso reforzar el trabajo de la OTCA con financiamiento no reembolsable, promoción de la integración regional y el impedimento de cualquier forma de militarización o injerencia extranjera en la región, así como de organizaciones no gubernamentales con intereses ajenos a los países de esta zona, entre otros.
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