Insistió en conferencia de prensa en que se entregará esa cifra a quien coadyuve a la captura del delincuente más buscado en el país altiplánico por su alta peligrosidad y alto valor para los países de la región debido a sus vínculos con el narcotráfico internacional.
Con apenas 32 años, medios periodísticos aquí denominan a Marset como el “hombre de las mil caras”, y se señala que se desempeñaba como financista de clubes de fútbol y como jugador de uno de segunda división en Santa Cruz, además de productor de espectáculos, contratista y vendedor de inmuebles de lujo.
Las fuentes policiales advierten que, sin embargo, tras esas fachadas, su carrera criminal lo convirtió en uno de los más poderosos capos del narcomundo, por lo cual miles de policías permanecen movilizados tras su rastro en todos los departamentos del Estado Plurinacional desde el 29 de julio último.
Del Castillo reafirmó que quien brinde información precisa ingresará a un procedimiento de “colaborador eficaz” y los datos que aporte serán manejados en reserva.
Indicó el titular que la Policía identificó a otros tres cómplices de Marset para quienes pidió se activen los sellos rojo y azul de búsqueda y captura.
“Dentro del trabajo investigativo hemos podido identificar al tercer miembro de esta organización criminal, dentro del territorio nacional, que corresponde al señor Roberto Arana Suárez de 40 años conocido en los medios cruceños como ‘Robertito’”, reveló.
Aclaró que, tras los allanamientos y documentos incautados, los cuerpos del orden identificaron que Arana se encargaba de la protección legal de la organización criminal.
Comentó que en varios inmuebles a nombre de esta persona (Arana) se encontraron elementos que lo vinculan directamente con Marset y su hermano, incluidas fotografías conjuntas, así como evidencias de un flujo de viajes a Estados Unidos, Colombia y Brasil.
“Se entiende que hay un control de mando y dirección que tienen como cabeza al señor Marset, el segundo que ya está detenido y el tercero el señor Arana”, enumeró del Castillo.
Las pesquisas indican que la organización criminal estaba dividida en dos, una integrada por bolivianos y otra por extranjeros, esta última dirigida por Diego Nicolás, hermano de Marset, y quien se encargaba de pagar por producto y recibir las drogas.
Otros identificados además de Arana son Néstor Alfonso (colombiano), calificado de facilitador y agente de confianza de la estructura nacional, y Rony Suárez Milliet, receptor de dinero para crear empresas blanqueadoras de los recursos provenientes del narcotráfico.
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