Las comunidades de Caimito y Buenos Aires exigen a las autoridades lugareñas que se respeten y reconozcan sus territorios y las fustigaron por favorecer a los intrusos reiteradamente denunciados por depredar la floresta suramericana, principal fuente de oxígeno del planeta.
Los nativos rechazaron esta semana con un plantón ante la Dirección Regional de Agricultura, en Pucallpa, capital de Ucayali, la pretensión de cercenar parte de los territorios de las comunidades para que se establezcan allí un grupo de menonitas.
La protesta fue motivada por el ingreso de los intrusos, con respaldo policial, el 21 de agosto, en la comunidad de Caimito.
El servicio de noticias Servindi denunció el 30 de junio pasado que elementos de una de las ramas más conservadoras de los menonitas han ocupado y depredado, en nombre de un supuesto derecho divino, más de cuatro mil 800 hectáreas de bosques tropicales.
Según un informe del portal periodístico Convoca, los menonitas conservadores provienen de países latinoamericanos y de Alemania y establecen en la Amazonia peruana colonias agrícolas que dañan el medio ambiente.
El informe indicó que en Perú hay 250 grupos menonitas que pretenden expandirse sin reconocer otra autoridad que no sea la Biblia y se niegan a acatar las leyes, la educación obligatoria, el servicio militar y el pago de impuestos.
lam/mrs
