Recientemente, el experto precisó que la vía interoceánica, por donde circula el 3,0 por ciento del comercio mundial, tiene el desafío de ser ejemplo de sostenibilidad ambiental, ante restricciones que asume en el tránsito de buques asociadas a los efectos de el fenómeno El Niño.
En un informe intitulado “Pasado, presente y futuro del Canal de Panamá”, el experto recordó que dos temas definen la operación del Canal: la capacidad de infraestructura y la disponibilidad del agua.
“Tenemos la responsabilidad de suministrar agua para el consumo humano, lo cual requiere de un balance muy particular entre las necesidades de la población y de mantener un negocio vigente para el mejor desarrollo de este país”, indicó.
En ese sentido, Vázquez subrayó que las inversiones en infraestructura del Canal estarán encaminadas a optimizar la utilización del agua y poder mover más cargas utilizando menos cantidades de este recurso líquido.
Agregó que con ese fin se avanza en un programa de adquisición de tierras que permita proteger la ribera oeste, hacer un corredor biológico y al mismo tiempo producir conectividad a través de rutas terrestres para complementar la estructura logística y mejorar la posición del Canal y del istmo ante el comercio internacional.
Al respecto, Vázquez señaló que realizan el mayor esfuerzo para poder desarrollar actividades económicas rentables y se espera que para 2050 la franja canalera sea un ejemplo de sostenibilidad ambiental y de éxito económico en sus operaciones, en las que el factor humano es clave.
b Un comunicado reciente de la Administración del Canal de Panamá (ACP) , señala que actualmente los niveles de los lagos artificiales Gatún y Alajuela, principales fuentes hídricas, han superado su momento más crítico, sin embargo, todavía no es momento para levantar las restricciones.
En la última semana los buques que se mantienen en espera han pasado de 135 a 108, debido a la disminución del cruce que se mantiene en 32 embarcaciones diarias.
La ACP informó a la prensa que los ingresos para la vía podrían rondar los 200 millones de dólares menos para 2024 debido al menor tránsito y calado autorizado.
Desde el pasado 30 de julio y hasta nuevo aviso, las autoridades del Canal redujeron la capacidad diaria del tránsito diario de embarcaciones para disminuir la posibilidad de restricciones de calado adicionales debido a la prolongada temporada seca que afecta a su cuenca.
Vásquez alertó en junio pasado que “como una medida extrema”, se “tendría que tomar la decisión de limitar el número de tránsitos” diarios de buques hasta un mínimo de 28 embarcaciones.
Dijo además que estas acciones son necesarias a pesar de la llegada de la temporada de lluvias y el continuo ahorro de agua.
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