Los activistas expresan “una vez más, su firme apoyo al Gobierno y pueblo cubanos en su petición de que los Estados Unidos levanten el bloqueo criminal a Cuba, ¡ya!, y retiren a este país hermano de la infame lista de países patrocinadores del terrorismo”, sostiene el documento entregado a Prensa Latina.
Agrega el escrito que de forma inequívoca para este pedido de todos los pueblos del mundo se imponen las razones inherentes a la solidaridad internacionalista legada por el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro.
Explica el texto que, aunque parezca increíble, el bloqueo contra Cuba data de hace más de seis décadas, pues fue aprobado por el presidente John F. Kennedy en febrero de 1962.
Indica que “esa política agresiva, como bien la definió el emblemático dirigente cubano Ricardo Alarcón de Quesada, no tiene otro calificativo que el de genocidio”.
Describe al respecto que busca “provocar hambre y desesperación, hacer sufrir a todo un pueblo, es sencillamente un crimen de lesa humanidad, el peor de todos. Es el genocidio más prolongado de la historia. Tres generaciones de cubanos lo han sufrido y lo sufren”.
El Movimiento Boliviano de Solidaridad paceño critica que en estas seis décadas el bloqueo ha sido extendido, profundizado y reforzado y afecta a terceros países.
Subraya que un ejemplo en ese sentido son otras 243 represalias privativas introducidas durante la Administración del expresidente Donald Trump.
Aclara que el mandatario Joseph Biden mantiene esas medidas punitivas, decisión que echa por la borda la política de acercamiento y diálogo entre Washington y La Habana establecida durante el Gobierno de Barack Obama.
Expresa el documento que, desde 1992, existe un respaldo creciente, hoy prácticamente unánime, de la comunidad internacional en la Asamblea General de las Naciones Unidas, en el ejercicio de condena al injusto bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos contra el pueblo de Cuba.
La nota recuerda que entre los días 19 y 26 de septiembre se llevará a cabo el 78 período de sesiones de la Asamblea General de la ONU, donde nuevamente los países de todo el mundo se expresarán en apoyo a la ínsula del Caribe.
Concluye el documento con la reafirmación de que “Cuba no está sola”.
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