Un informe de la CEDH reveló que los daños civiles, las pérdidas de vidas y el encarcelamiento arbitrario se encuentran entre las preocupaciones más urgentes en esa localidad en estado de emergencia desde el 4 de agosto pasado debido a los enfrentamientos entre las fuerzas regionales y grupos armados pertenecientes a la milicia FANO.
La comisión instó a todas las partes a respetar los derechos humanos y el derecho internacional, luego de recopilar informaciones de víctimas, testigos y residentes de la zona. Los testimonios corroboraron los informes sobre la intensificación del conflicto armado en numerosos distritos, poniendo en peligro a la población civil.
“Los agricultores que trabajan en el campo, así como aquellos que buscan refugio en sus hogares, se han visto atrapados en el fuego cruzado de tiroteos y armamento pesado”, precisó el texto.
La Comisión recomendó ejecutar adecuadamente el decreto de emergencia y adherirse estrictamente a los protocolos legales como medio eficaz para resolver la crisis.
Ese organismo estatal federal independiente está establecido por la Constitución y rinde cuentas a la Cámara de Representantes de los Pueblos (parlamento) como un instituto nacional encargado de la promoción y protección de los derechos humanos.
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