El índice dólar, que compara a la divisa estadounidense con una cesta de seis destacadas monedas, perdió 0,4 por ciento, a 105,75 unidades, pero se encamina a terminar el trimestre con un alza del 2,8 por ciento, junto con un undécimo repunte semanal consecutivo, la racha más prolongada en nueve años.
Al respecto, el rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense, que estaba apoyando al dólar, caían desde máximos de varios años, un factor que, junto a un aumento del 27 por ciento en el precio del petróleo este trimestre, ayuda al billete verde a volverse positivo para el año frente a casi todas las divisas principales.
Por su parte, pese a lograr un cierto respiro, la presión sobre el yen se mantiene, ya que cotiza cerca de las 150 unidades por dólar, un nivel que muchos consideran como posible desencadenante de una intervención por parte de las autoridades.
En cuanto al euro, avanza por segundo día consecutivo. En su última cotización mejoró 0,4 por ciento, a 1,0608 dólares, alejándose de su mínimo multimensual de esta semana, de 1,0488 dólares.
La libra esterlina ganó 0,2 por ciento, a 1,2236 dólares, tras tocar su mínimo desde el 17 de marzo esta semana, después de datos que mostraron que los resultados económicos de Reino Unido desde el inicio de la pandemia de la Covid-19 llegan a ser mejores de lo esperado.
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