Los más de 300 delegados al evento tienen una agenda que incluye asuntos como la seguridad pública, el tráfico de drogas y la trata de personas, tema este último sobre el cual el país anfitrión expondrá sus experiencias, a través del comisario jefe de Investigación Criminal, António Bendje.
De acuerdo con información ofrecida por Interpol, una operación reciente de conjunto con el Mecanismo de Cooperación Policial de la Unión Africana (Afripol), realizada contra la trata de personas y el tráfico ilícito de migrantes, condujo a más de mil detenciones y a la detección de miles de víctimas.
También reveló un aumento de la captación en línea de las personas para estas redes, a través de plataformas de comercio electrónico.
Los delegados demandaron más datos relacionados con el terrorismo, en particular biométricos, así como análisis criminológicos para identificar a las personas y sus movimientos internacionales.
El secretario general de Interpol, Jürgen Stock, señaló que la información es el mayor bien con el que cuentan, y resulta vital en un escenario donde los grupos de delincuencia organizada son cada vez más fuertes y complejos.
La víspera el presidente de la Organización, Ahmed Naser Al-Raisi, apuntó que el trabajo conjunto con Afripol permitió desmantelar recientemente 24 ciberredes delictivas que pretendían apoderarse de más de 40 millones de dólares en la región.
Añadió que como parte de sus operaciones, en mayo de este año bloquearon más de 200 cuentas bancarias vinculadas a diversas redes de organizaciones delictivas de África Occidental.
Consideró que el continente enfrenta un aumento de la ciberdelincuencia, que está creando grandes retos para los gobiernos, las empresas y los ciudadanos, pues los ataques son cada vez más complejos y los métodos para acceder a datos e información confidenciales más innovadores.
Al respecto enfatizó en la necesidad de crear cada vez más capacidades para combatir los delitos internacionales a escala mundial.
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