Durante la cita, en la cual presidentes y cancilleres latinoamericanos dialogaron acerca de la búsqueda de mecanismos para una migración ordenada, Petro dijo que «habrá una conferencia de presidentes de América Latina en Bogotá el año entrante».
En su opinión, la reunión de este domingo fue precursora, donde se dieron los primeros elementos para construir una política común latinoamericana, alrededor de un tema cada vez más grande y grave: la migración, el éxodo.
En la conferencia de Bogotá, los participantes tratarán de profundizar lo que empezó a construirse en el encuentro de México, denominado «Por una vecindad fraterna y en busca del bienestar».
La reunión de Palenque procuró en su Declaración Final construir soluciones integrales a los flujos migratorios sobre los siguientes objetivos: considerar sus causas político-económicas y social y el cambio climático; los factores externos como la discriminación y la distribución de la riqueza que afecta a poblaciones enteras.
Para ello, los participantes plantearon una diversidad de acciones, como procurar la autosuficiencia y soberanía alimentaria, dar prioridad al sector agrícola, al cuidado del medio ambiente, empleo digno, energía renovable, autosuficiencia sanitaria, inversión, al combate contra el crimen organizado y tráfico de personas.
También acordaron agregar un acápite para proponer a los Gobiernos de Cuba y Estados Unidos sostener un diálogo lo antes posible sobre sus relaciones bilaterales.
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