Los repatriados angoleños que viven en el emplazamiento de Tshilumba, en la comuna de Katoka, en Kananga, provincia de Kasai-Central, demandaron que los refugios no cumplen las normas humanitarias.
La seguridad alimentaria y sanitaria no está garantizada, dijo uno de los repatriados, quien añadió que tampoco les han dado recursos financieros para hacerse cargo de mejorar esos espacios en que los ubicaron, reseñó el medio de prensa.
La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) construyó en la comuna de Katoka, a unos diez kilómetros de la ciudad de Kananga, refugios para 500 familias, en el marco del proyecto para la repatriación de los refugiados de la RDC en otros países.
El objetivo del proyecto es proporcionar protección y asistencia multisectorial a los retornados, desplazados internos y poblaciones de acogida extremadamente vulnerables de la provincia de Kasai Central.
Los ubicados en esa zona habían huido a Angola durante la violencia vinculada al conflicto de las milicias Kamwina Nsapu, en 2017.
El pasado mes de octubre la Acnur retomó la repatriación desde Angola de este grupo de personas a través de vuelos en los cuales regresaron a la RDC más de un centenar de refugiados.
Según información de ese organismo, hasta el cierre de agosto de 2023 permanecían en el país vecino un total 23 mil 265 congoleños, incluidos nueve mil 385 pertenecientes a los desplazados por la violencia en la región de Kasai.
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