Se trata de una mega operación para desarticular la agrupación integrada hasta ahora por siete nacionales y cinco extranjeros, explicó a la prensa Randall Zúñiga director del OIJ, luego de precisar que el grupo en apariencia utilizaba una empresa de bebidas gaseosas como mampara para hacer los envíos a Europa.
El OIJ además, busca a un abogado encargado de hacer movimientos para insertar el dinero del grupo en el sistema bancario nacional con el fin de legitimarlo, así como un arquitecto que les colaboraba con desarrollos inmobiliarios.
El jefe policial indicó que se realizan los trabajos en localidades de Curridabat, La Unión, Escazú, San Pedro, Santa Ana, Atenas, Grecia, Turrialba, Coronado y Poás.
Como parte de la operación, se ordenó el decomiso de 26 carros de alta gama y anotación de 39 propiedades, entre los que figuran centros comerciales, negocios y viviendas.
Costa Rica vive una ola de criminalidad, con homicidios que ascienden a 790 en lo que va de año, asociada entre otras causas al narcotráfico, y ajustes de cuentas por el control de localidades.
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