“De estas siete plantas que integran todo el Complejo, estarán ya empezando a operar esas seis plantas que estarán terminadas de construir hasta el mes de agosto y en septiembre del próximo año ya van a estar operando seis plantas del Complejo Siderúrgico del Mutún”, afirmó ante la prensa.
Edificada con una inversión de 546 millones de dólares, esta obra abarca un área de 42 hectáreas en el departamento de Santa Cruz, en las cuales radicarán las plantas de Concentración, Peletización, Reducción Directa (DRI), Aceración, Laminación, Central Eléctrica y Auxiliares.
Describió Alvarado que el emplazamiento de RDI será concluido en febrero de 2025, por lo que el Complejo Siderúrgico del Mutún empezará a operar al 100 por ciento a partir de marzo de ese año.
Aclaró que “evidentemente, tenemos (…) un retraso en la conclusión de la obra, de acuerdo al cronograma que se había elaborado y este retraso se debe a que lastimosamente y, es de conocimiento general, particularmente aquí en la provincia, de que el año 2020 fue paralizada la obra durante un año y medio”.
Otra de las razones fundamentales del retraso en la conclusión de la obra, agregó, son los 36 días de bloqueo en Santa Cruz el año pasado por parte de cívicos cruceños y el permanente bloqueo en la carretera Bioceánica.
“Por esa razón, también ha habido un retraso importante en la conclusión de esta obra y por eso digo que, inclusive, hemos tenido que actualizar y esa actualización tampoco se está pudiendo cumplir debido a estas razones”, deploró.
Reiteró Alvarado que, pese a estos obstáculos, la construcción del Complejo Siderúrgico del Mutún, en el municipio de Puerto Suárez, avanza y hasta la fecha alcanzó alrededor del 85 por ciento.
Sobre el equipamiento, indicó que ya está fabricado el 97 por ciento de todos los equipos que serán instalados en el complejo.
Paralizada la obra por el gobierno de facto de Jeanine Áñez (2019-2020), los trabajos de edificación se reiniciaron en junio de 2021 por instrucciones del presidente de Bolivia, Luis Arce, como parte de la política de industrialización con sustitución de importaciones.
Se espera que la producción anual de 200 mil toneladas de acero en este complejo permita sustituir casi el 50 por ciento de las cerca de 450 mil toneladas importadas cada año desde Argentina, Brasil y Perú.
La ESM producirá y comercializará barras corrugadas de acero y alambrón, las primeras son necesarias en la construcción y las segundas, sirven de materia prima para subproductos como tuercas, tornillos y clavos.
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