Al mismo tiempo, su situación tiende a ser más comprometida con la libertad obtenida por quien fuera su asesor y brazo derecho, Jaime Villanueva, luego de aceptar convertirse en colaborador de la Fiscalía y confirmar que hacía gestiones indebidas por órdenes de Benavides y confirmar la veracidad de las evidencias contra ella.
La fiscal acudió a la audiencia de la JNJ junto a su abogado, el conocido político neoliberal Jorge del Castillo y reiteró que se somete a cualquier tipo de investigación, aunque ha intentado bloquear pesquisas como las de la JNJ.
Tras exigir respeto a sus derechos y fuero, agregó que los magistrados de la Junta “me han instaurado un tipo de procedimiento que viola mi derecho de defensa y mi derecho del debido proceso” pero que figura en las atribuciones del órgano que nombra, evalúa y destituye a jueces y fiscales.
Añadió que, ante ello, ha presentado varios recursos como un pedido de inhibición de tres de los jueces de la JNJ porque que la Fiscalía los investiga por supuestas presiones sobre el presidente del Poder Judicial, Javier Arévalo, que este ha negado, pese a lo cual la indagación se mantiene.
Posteriormente, su abogado -incluido en una investigación de la Fiscalía por lavado de activos, alegó que su cliente no ha recibido ninguna respuesta a sus apelaciones, y el magistrado Aldo Vásquez respondió que ya había sido respondido que la impugnación a los tres magistrados, desestimándola. Sin embargo, Del Castillo sostuvo que no había garantías para su defendida y ambos se retiraron y la junta continuó deliberando su debate sobre la ponencia que plantea suspender a Benavides por seis meses.
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