Tal anuncio de este miércoles recalca que esa instancia pondrá fin a las entregas diarias de cartas, cuyo volumen se recortó en casi un 70 por ciento en los últimos 15 años, como parte de una serie de reformas con el objetivo de modernizar la compañía pública y ayudarla a obtener beneficios.
Australia Post apuntó que en su lugar las cartas serán entregadas cada dos días laborales en el 98 por ciento de las ubicaciones, mientras que la entrega de paquetes continuará con su frecuencia diaria.
La reforma, anunciada en un comunicado conjunto de los ministerios de Comunicaciones y Finanzas, se implementará durante los próximos 12 meses junto con otros cambios para aumentar el número de puntos de recogida de paquetes.
El gobierno australiano justificó la medida al señalar que desde su pico máximo, en 2008, los volúmenes de cartas se redujeron en dos tercios, mientras que los de paquetes aumentaron.
mem/rfc
