El magistrado Monteagudo argumentó que la decisión del TC que reactivó el indulto incurrió en causa de nulidad porque se pronuncia sobre un asunto que en ningún momento fue sometido a conocimiento ni deliberación por el pleno del tribunal.
Se refirió así a que el tema original fueron las consultas de las partes sobre un habeas corpus a favor de la libertad de Fujimori rechazado por un juez, sobre cuestiones ajenas a la vigencia del indulto, a las que debió ceñirse la corte, pues solo se pronuncia sobre apelaciones y consultas y no por iniciativa propia.
Agregó a ello el hecho de que la resolución que resucita el polémico indulto de diciembre de 2022 fue aprobada solo con los votos de tres de los seis integrantes del TC.
Votaron a favor el presidente de la corte, Francisco Morales, y los jueces Luz Pacheco y Gustavo Gutiérrez, y se negaron a aprobar el dictamen Monteagudo, Helder Domínguez y César Ochoa.
Con anterioridad, Monteagudo cuestionó la orden de libertad inmediata a Fujimori, dictada y firnada por Morales, Pacheco y Gutiérrez, sin la participación de Monteagudo, Domínguez y Ochoa, según denunció el autor del pedido de nulidad.
Argumentó también que la primera resolución del TC debió acatar la determinación de la Corte Intereamericana de Derechos Humanos (CIDH) y abstenerse de liberar a Fujimori.
Esa abstención “es lo que corresponde de acuerdo con la Constitución peruana, la ley y la jurisprudencia del Sistema Interamericano, no hay razón para no actuar de esa forma”, aeveró.
Monteagudo añadió que no se refiere a la salud del preso por crímenes de lesa humanidad ni a su situación personal, pues el problema jurídico es mucho mayor y más grave.
“Hemos sido elegidos para tomar decisiones como Tribunal Constitucional, no a través de tres personas”, explicó.
Señaló que los tres jueces que aprobaron la resolución “adoptaron, por sí y ante sí, la delicada, inédita y altamente cuestionable decisión de sostener que «queda fuera de la competencia de la Corte-IDH ordenar a un Estado no ejecutar una sentencia de un tribunal nacional” y liberar a Fujimori contra compromisos internacionales y la jurisprudencia.
De otro lado, el expresidente Pedro Pablo Kuczynski, que dictó el indulto anulado por ilegal, saludó la libertad del exgobernante y llamó a “limpiar la CIDH de rojos (comunistas)” por cuestionar la medida, calificativo que usó pese a que esa corte adversa sobre todo a gobiernos progresistas que no están adscritos a ella.
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