Las corporaciones Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB) y la rusa Uranium One Group rubricaron el entendimiento que prevé la edificación de la obra generadora de ese volumen del producto en tres fases.
“Esta firma de convenio se traduce en beneficios para nuestro país. A partir de este convenio estamos seguros que estas inversiones y el trabajo y la producción que se van a generar, vamos a generar mayor desarrollo”, afirmó el dignatario durante la ceremonia realizada en la Casa Grande del Pueblo (sede gubernamental).
Aseguró que el convenio ratifica “la forma y el modelo de producción y comercialización” que el Estado Plurinacional plantea a todas las empresas extranjeras interesadas en el litio boliviano.
Sostuvo Arce que con este acuerdo Bolivia ratifica “que nosotros somos y participamos en absolutamente todos los puntos de la cadena productiva y de comercialización de nuestro litio (…), porque así lo determina nuestro modelo de negocio que lo explicamos a diferentes países”.
Destacó el jefe de Estado que este mineral en la actualidad “es privilegiado en el mundo”, y Bolivia tiene una importante reserva que llega a 23 millones de toneladas en los salares de Uyuni, Pastos Grandes y Coipasa, ubicados, en los departamentos de Potosí y Oruro, respectivamente.
La presidenta de YLB, Karla Calderón, por su parte, recordó que es el segundo convenio sellado con la empresa rusa Uranium One Group, subsidiaria de la corporación Rosatom.
“(…) Es un paso importante en la industrialización de litio bajo un modelo soberano”, insistió.
Comentó la titular que se trata de la construcción de una planta piloto con tecnología EDL, para la producción de carbonato de litio grado batería, en tres diferentes fases.
Durante la primera, la factoría producirá mil toneladas anuales; en la segunda, escalará hasta las ocho mil y en la tercera añadirá otras cinco mil toneladas, lo cual suma un total de 14 mil toneladas por año.
A su turno, el ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina, recordó que es la primera vez que se instala ese tipo de proyecto en el país, tras una convocatoria presentada en abril de 2021 para que empresas internacionales presentaran sus propuestas sobre la base de la tecnología EDL.
Informó Molina que la construcción de la primera fase de la factoría demandará una inversión de 100 millones de dólares, la segunda, que sería la ampliación, requerirá 200 millones de la moneda estadounidense para edificar un módulo semiindustrial.
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