La legisladora confirmó que ayer viajó a Madrid para pasar, como todos los años, la Navidad con sus hijos, aunque la filtración de su partida motivó suspicacias porque anoche mismo difundió un video en el que sostuvo que está enterada que la Fiscalía pretende allanar su casa y su oficina y ordenar su detención.
Sin embargo, eso no es posible, por la inmunidad parlamentaria de Chirinos, salvo que un fiscal supremo le abra una investigación específica y el Parlamento autorice su captura y ella misma dijo que “no tengo motivo para huir”.
La legisladora, en su video y en las declaraciones de hoy, culpó de los alegados aprestos de la Fiscalía a “la mafia caviar”, como la derecha extrema define a sectores de izquierda y centristas de posiciones diferentes a las conservadoras.
Sostuvo igualmente que la supuesta conjura en su contra se debe a que entre sus múltiples denuncias que ha presentado como congresista están las dirigidas contra los expresidente Pedro Castillo y Martín Vizcarra, los jueces de la Junta Nacional de Justicia (JNJ) y una larga lista de exministros de ambos, entre otros personajes.
Sobre el hecho de que el video precedió a un viaje no conocido públicamente, como motivo de las versiones sobre su presunto asilo, dijo que no le importa lo que digan porque debe seguir con su vida.
Chirinos es defensora a ultranza de la fiscal de la Nación, Patricia Benavides, suspendida por la JNJ porque una investigación de la fiscalía anticorrupción ha encontrado indicios de que encabeza una organización delictiva.
También es una de las congresistas que, según la prensa coordinaban con un asesor de Benavides, la suma de votos por decisiones parlamentarias favorables a la permanencia de la fiscal en el cargo, a cambio de anular pesquisas a decenas de legisladores.
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