“(…) Se tiene todas las condiciones y facilidades para que nuestra empresa Boliviana de Aviación y todas las empresas que quieran venir hasta Rurrenabaque tengan todas las comodidades para brindar sus servicios”, aseguró el mandatario en un discurso.
Durante el acto se informó que este proyecto llevado adelante en dos etapas requirió una inversión de 93 millones de bolivianos (más de 13 millones de dólares).
Recordó Arce que los trabajos en esta terminal aérea avanzaban con lentitud, pero tras el rescate de la democracia con su triunfo electoral en 2020, se decidió acelerar y concluir la reconstrucción de esta infraestructura, y ahora Rurrenabaque “tiene un aeropuerto moderno y digno”, de categoría internacional.
La instalación cuenta con oficinas administrativas, áreas de embarque y preembarque, sistemas de seguridad, torre de control, una unidad de bomberos con un vehículo moderno, una ambulancia, planta de asfalto, equipamiento de computación, medios de comunicación y mobiliario.
Describió el mandatario que tres aeropuertos en Bolivia poseen este arsenal técnico, y el de Rurrenabaque es uno de ellos, situación que le permite brindar todas las condiciones a los viajeros, incluidos los turistas.
Anticipó que desde el 25 de diciembre BOA cubrirá esa ruta en vuelos regulares los lunes y miércoles, y a partir de este viernes se habilitará la línea a Riberalta de manera regular los lunes, miércoles, viernes y domingo.
“Lo hemos dicho reiteradas veces, hemos puestos los ojos en Beni, y aquí está la muestra clara de que queremos comunicarnos con vuelos permanentes para que los hermanos de Beni no estén incomunicados con el resto de los departamentos del país. Tenemos dos aeronaves que harán el recorrido por estos dos aeropuertos”, enfatizó el dignatario.
Subrayó Arce que el precio del pasaje será menor que el de otras aerolíneas que cubren esos itinerarios.
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