Este jueves, los centros de votación y de recuento que no funcionaron en absoluto la víspera fueron abiertos desde las 06:00 hasta las 17:00, hora local, una medida que según el comunicado de la CENI está dentro de las disposiciones de la ley.
El ente electoral señaló que ello responde al principio de igualdad de derechos del que deben disfrutar todos los ciudadanos indistintamente, y aclaró que los colegios que estuvieron abiertos y operativos el 20 de diciembre no se ven afectados por esta medida.
La CENI reconoció el retraso en el despliegue de materiales y equipos electorales, lo que provocó la apertura tardía de algunos centros de votación, de ahí que dispusieran la extensión de los horarios ayer y la apertura excepcional de esta jornada.
Sin embargo, cinco de los 19 candidatos presidenciales no estuvieron de acuerdo y emitieron una declaración en la que exigen la reorganización de las elecciones legislativas en la RDC y se oponen a cualquier prolongación del escrutinio.
Floribert Anzuluni, Nkema Lilo, Théodore Ngoyi, Denis Mukwege y Martin Fayulu aseveraron que es constitucional y legalmente imposible que la CENI tome tal decisión.
Por tal motivo, pidieron al pueblo congoleño, al gobierno, a la Comunidad para el Desarrollo del África Austral, a la Unión Africana y a la comunidad internacional que demanden la organización de nuevas elecciones en condiciones que garanticen la igualdad de todos los contendientes.
En algunos sitios, como en Tshikapa, provincia de Kasai, varios ciudadanos atacaron los kits electorales debido a la sospecha de que los agentes de la CENI intentaban alterar los votos o rellenar las urnas en algunos colegios electorales, reportó Radio Okapi.
Los jóvenes molestaron a los agentes de la CENI e hirieron a otros lanzándoles piedras, también demolieron una casa cuyo propietario era sospechoso de guardar en su domicilio dispositivos electrónicos de votación y papeletas de sufragio, situación que requirió la intervención de la policía.
En Kenge, en la provincia de Kwango, un agente de la CENI fue secuestrado y tuvo que ser liberado por las fuerzas del orden.
Esto transcurría paralelamente con el recuento de las boletas, que comenzó en varios centros de votación de la ciudad de Kinshasa a última hora de la noche del miércoles y hasta primeras horas de la mañana del jueves.
jf/kmg