El Ministerio de Exteriores nigerino remitió a las embajadas de Estados Unidos, Alemania e Italia en esta capital la petición de que informen a sus gobiernos que este país revisará sus convenios de cooperación militar.
Estados Unidos con mil 100 soldados y oficiales; Italia y Alemania, con sendos contingentes de un centenar, son los integrantes de la OTAN a los que va dirigida la comunicación del Consejo Nacional por la Salvaguarda de la Patria (CNSP), nombre del gobierno de transición castrense.
Los indicios apuntan a que es sustantiva la posibilidad de que esos tres estados con militares estacionados en este pequeño y empobrecido país africano, poseedor de enormes reservas de uranio, de ahí el interés de las potencias occidentales, tengan que retirarlos, .
Apenas transcurridos 13 días del derrocamiento de presidente nigerino Mohamed Bazoum, las nuevas autoridades encabezadas por el general Abdourahmane Tchiani pidieron la expulsión del embajador francés; después, el CNSP demandó la evacuación de sus militares estacionados en el país.
Esas decisiones ocurren tras la demanda del gobierno militar maliense de la retirada de su territorio de las tropas galas, indicios de una tendencia al alejamiento de las excolonias africanas de París de su antigua metrópoli.
Además coinciden co un esfuerzo concertado de las cancillerías de las expotencias coloniales europeas y Estados Unidos para que los estados africanos olviden sus lazos históricos con la exURSS y Rusia y condenen la operación militar especial de Moscú en Ucrania.
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